TORRELAVEGA ROJA
Torrelavega, como las demás ciudades y pueblos españoles, vivió, se entusiasmó, emocionó, disfrutó de un mundial de fútbol que al final consiguió por que ha hecho el mejor juego, por merecimientos y contra alguna adversidad como algún arbitro que otro y, sobre manera, el que pitó la final contra Holanda, equipo por cierto, que no se privó de hacer juego sucio, hacer anti fútbol y con nula deportividad. Pero esto es una crónica que ya se ha contado, al igual que la unión que ha forjado entre todos, futboleros o no, la Selección Nacional. Una ilusión colectiva que se ha vivido en Torrelavega, como en todos los lugares, en las casas, las asociaciones, las plazas públicas, los establecimientos hosteleros, en familia, entre diferentes familias, los niños, los jóvenes en sus lugares habituales de esparcimiento, los adultos. Todos hemos disfrutado y vivido un mundial especial desde su inicio. Se intuía y teníamos la confianza en que, ¡¡Esta vez sí la ganamos!!
A la izda., parte del equipo que realiza los domingos de 11 a 13 h., el programa radiofónico "Diamantes Musicales", que como la gran mayoria, no se privaron de ponerse algunos de los colores identificativos con "la roja". Paco "Don Disco", Dani "60" y Jose "el Pincha" .
Y así ha sido. Somos los Campeones del Mundo de Selecciones Nacionales de Fútbol.
¡¡Toma ya!!.
Aquí queda mi pequeño reportaje grafico, domestico, familiar, entre amigos que será más o menos, como el de otros muchos de los realizados en Torrelavega. Sí. Torrelavega se tiño de rojo, por culpa y gracias a las Selección Nacional de Fútbol.
En cuanto termino el partido y la ceremonia de la entrega de la Copa, comenzo la movilización general de vehiculos y peatones, la gran mayoria y de todas la edades hacia la fuente del Centenario. Las bocinas de los coches atronando y los transeuntes, coreando entre otros el ¡Campeones! ¡Campeones!. En seguida la fuente fue tomada al asalto, pero no habia agua, la habian cortado. Eso no fue obstaculo, pues en poco tiempo alguien rompio las conducciones de agua y a mojarse. Así fue y durá una o dos horas. La gente se bañaba, cantaba y bailaba, empapados, con y sin ropa. Otros se dirigieron hacia la zona de bares y allí, con la ambientación musical de los locales, continuaron la celebración, no se hasta que hora, pues a las 02,30 se me acabo la bateria de la maquina y ya no pude hacer mas. Ya se que las fotos son muy deficientes, pero es lo que hay.
1 comentario:
No me canso de frotarme los ojos tras la conclusión del partido, y de eso ya hace más de una semana. Primero fue estupor, luego incredulidad, luego expectación (no fuera que el arbitro anulara el tanto de Iniesta) y por fin una explosión incontenible de alegría manifestándose por medio de un profundo y sentido lacrimeo.
Campeones contra viento, marea y Suiza.
Fuera gafe, fuera la maldición de los cuartos, fuera la "furia pálida" y un "a callar" a todos los agoreros y "sabios" de aquí o de allá.
Ah, y un sincero aplauso a la afición holandesa por como acogieron a su selección tras perder la final, algunos deberían aprender.
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