Son las 6,20 h y desde el camarote se avista lo que se ve en esta imagen, estamos a punto de tocar puerto en la isla de Patmos. Es esta, una de las más Sagradas islas para el mundo cristiano, me dicen por allí algun exagerado, y por otro lado una de las islas más tradicionales y auténticas del Dodecanesso. Tiene 63 Kms. de costas. Es una de las islas habitadas más pequeñas y tiene una curiosa forma de 8, repleta de colinas rocosas, poca vegetación y dos poblaciones principales, Patmos Jora y Skala. Su fama se debe a que, durante la dominación romana fue lugar de destierro y en la ruta del Apóstol San Juan, en el 97 d. de C., vivió exiliado durante cierto periodo. Fue en este lugar donde el Apóstol escribió los terribles textos del Apocalipsis.
. . . . .
Es una hora bien temprana y la luz es impresionante. Es una costante en todo el viaje, la luz de Grecia. Bueno, pues el barco, como se ve, ya ha atracado y yo, como no me apetece subir hasta no se que monte para ver no se que iglesia, donde dicen, que estuvo San Juan y escribió ahí mismo la Apocalipsis (esta señalizado y todo, en el cartel de la rotonda), me tomo una terraza y me pongo a contemplar el movimiento de la zona del puerto. Muy animada desde primera hora. Claro, no es de extrañar, ya que de repente desembarcan unas mil personas de golpe. Unas a visitar la susodicha iglesia y otros a visitar tiendas y a comprar lo que se tercie. Yo sigo con mi café y un refrescante zumo de naranja con hielo. Tan temprano y el sol aprieta de forma que tengo buscar una sombra, por que además empieza a hacer calor.
La escala en Patmos ha sido de tres horas y media. De nuevo al barco y se reanuda la travesía, ahora con destino a la costa de Turkia, ha donde esta previsto llegar hacia las 16.30 h. para visitar Kusadasi, la antigua Efeso, que es así como yo la conocí hace unos años, en anterior viaje a este país.
En la foto de la izquierda salida de la isla de Patmos y ya, a la derecha avistando Kusadasi, en Turkia.
Kusadasi significa en turco Isla de los Pájaros. La ciudad esta localizada a una distancia a pie de puerto. Se ha transformado a través de los años en un paraíso de negocios con grandes compras, se encuentran infinidad de tiendas y comercios de venta de artesanía, alfombras, cuero y zapatería, textil, etc. Desde la floreciente ciudad de Kusadasi, viajando por la costa y adentrándose en el campo hasta llegar a Efeso, famosa en el mundo antiguo por su Templo de Diana, una de las Siete Maravillas de la Antigüedad, que fue más tarde morada de San Juan (la verdad que sabía elegir los sitios, este santo, primero la plácida isla de Patmos y ahora este templo). E Efeso se descubren innumerables monumentos, entre los que destacan el Foro, el Odeón, la Biblioteca de Celso, las Termas de Escolástica y el Gran Teatro, construido en la época griega y más tarde reconstruido en el Periodo Romano. Este lugar, ya lo visite en el anterior viaje y tengo que decir que es de lo mejor conservado. También aquí se encuentra la que dicen, fue casa de la virgen ¡Vaya vd. a saber! el caso es que hacia allí se fue la marabunta de turistas. Nosotros preferimos quedarnos y perdernos un poco por las animadas calles de Kusadasi. Por cierto, otro de los espectáculos lo constituye, el muelle de atraque de los cruceros, cada cual mas grande y mas impresionante.
Con esto, embarcamos y ponemos rumbo a Rodas, donde pasaremos toda la jornada de mañana. Y esta, si que es una gran ciudad, con mucho que ver.
Son las 6,20 h y desde el camarote se avista lo que se ve en esta imagen, estamos a punto de tocar puerto en la isla de Patmos. Es esta, una de las más Sagradas islas para el mundo cristiano, me dicen por allí algun exagerado, y por otro lado una de las islas más tradicionales y auténticas del Dodecanesso. Tiene 63 Kms. de costas. Es una de las islas habitadas más pequeñas y tiene una curiosa forma de 8, repleta de colinas rocosas, poca vegetación y dos poblaciones principales, Patmos Jora y Skala. Su fama se debe a que, durante la dominación romana fue lugar de destierro y en la ruta del Apóstol San Juan, en el 97 d. de C., vivió exiliado durante cierto periodo. Fue en este lugar donde el Apóstol escribió los terribles textos del Apocalipsis. . . . . .
Es una hora bien temprana y la luz es impresionante. Es una costante en todo el viaje, la luz de Grecia. Bueno, pues el barco, como se ve, ya ha atracado y yo, como no me apetece subir hasta no se que monte para ver no se que iglesia, donde dicen, que estuvo San Juan y escribió ahí mismo la Apocalipsis (esta señalizado y todo, en el cartel de la rotonda), me tomo una terraza y me pongo a contemplar el movimiento de la zona del puerto. Muy animada desde primera hora. Claro, no es de extrañar, ya que de repente desembarcan unas mil personas de golpe. Unas a visitar la susodicha iglesia y otros a visitar tiendas y a comprar lo que se tercie. Yo sigo con mi café y un refrescante zumo de naranja con hielo. Tan temprano y el sol aprieta de forma que tengo buscar una sombra, por que además empieza a hacer calor.
La escala en Patmos ha sido de tres horas y media. De nuevo al barco y se reanuda la travesía, ahora con destino a la costa de Turkia, ha donde esta previsto llegar hacia las 16.30 h. para visitar Kusadasi, la antigua Efeso, que es así como yo la conocí hace unos años, en anterior viaje a este país.
En la foto de la izquierda salida de la isla de Patmos y ya, a la derecha avistando Kusadasi, en Turkia.
Kusadasi significa en turco Isla de los Pájaros. La ciudad esta localizada a una distancia a pie de puerto. Se ha transformado a través de los años en un paraíso de negocios con grandes compras, se encuentran infinidad de tiendas y comercios de venta de artesanía, alfombras, cuero y zapatería, textil, etc. Desde la floreciente ciudad de Kusadasi, viajando por la costa y adentrándose en el campo hasta llegar a Efeso, famosa en el mundo antiguo por su Templo de Diana, una de las Siete Maravillas de la Antigüedad, que fue más tarde morada de San Juan (la verdad que sabía elegir los sitios, este santo, primero la plácida isla de Patmos y ahora este templo). E Efeso se descubren innumerables monumentos, entre los que destacan el Foro, el Odeón, la Biblioteca de Celso, las Termas de Escolástica y el Gran Teatro, construido en la época griega y más tarde reconstruido en el Periodo Romano. Este lugar, ya lo visite en el anterior viaje y tengo que decir que es de lo mejor conservado. También aquí se encuentra la que dicen, fue casa de la virgen ¡Vaya vd. a saber! el caso es que hacia allí se fue la marabunta de turistas. Nosotros preferimos quedarnos y perdernos un poco por las animadas calles de Kusadasi. Por cierto, otro de los espectáculos lo constituye, el muelle de atraque de los cruceros, cada cual mas grande y mas impresionante.
Con esto, embarcamos y ponemos rumbo a Rodas, donde pasaremos toda la jornada de mañana. Y esta, si que es una gran ciudad, con mucho que ver.
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