Nos prejubilan desde los 52 años y sitúan a un octogenário al frente de RTVE.

Tengo el bloc de notas lleno de apuntes y de lo más variado. Uno de los temas hace referencia mi antigua casa laboral, RTVE y, concretamente, al cambio en la Presidencia de la hoy denominada Corporación de RTVE. Se trata del ex ministro de Defensa con UCD Alberto Oliart que sustituirá como Presidente de la Corporación RTVE a Luis Fernández, tras el acuerdo alcanzado entre José Luis Rodríguez Zapatero y el presidente del Partido Popular, Mariano Rajoy. Por lo que he podido leer y comentar con mis antiguos compañeros, la sensación es de incredulidad y sorpresa. Primero por la edad del que será su Presidente en esta empresa, y luego por que nadie le defiende por sus conocimientos y experiencia en los medios de comunicación audiovisuales, de los que dice no tener ni idea.

Pues no entiendo nada. No entiendo por que se va Luis Fernandez porque, entre otras cosas no lo ha explicado, aunque a mi modo de pensar, creo que “se ha quitado el muerto de encima”, vislumbrando que solo con los ingresos provenientes de los presupuestos del Estado, la Radio y Televisión Publicas no podrán subsistir, perdiendo calidad y audiencia y entonces, lo que le espera a RTVE, es la muerte por inanición, dado que partir de enero ¿Cómo se va a alimentar si dejara de tener publicidad comercial? ¿Cómo va a competir con el resto de las Cadenas? ¿Qué programación se va a hacer con tan drástica reducción de recursos? Siendo mejorable, siempre a mi modo de entender, la última etapa de RTVE, la de Luis Fernandez y en los últimos tres años ha sido la mejor, con óptimos índices de share, una encuesta realizada en setiembre reflejaba que La 1 y para la mayoría de los españoles, era la cadena favorita, seguida de T5 y A3, cerrando en octubre con los índices de audiencia, como la cadena mas vista, con un 16,3% de cuota de pantalla. Los informativos recuperaron la primacía, siendo los mas vistos, con la consideración general de ser los mas independientes y neutrales en lo concerniente a la política, que es lo que en definitiva, mueve los hilos de este y todos, los medios de comunicación, no nos engañemos. Y ahora me pregunto ¿Podría reintegrarme a mi antiguo trabajo? Si ya cuando se aplicó el ERE (expediente de regulación de empleo) por el que yo salí de esta empresa, después de 35 años de servicio y con 58 años (ha habido prejubilaciones con menos años), se supone que para rejuvenecer la plantilla, reducir el exceso de la misma y dar entrada a los jóvenes, se “ficha” para presidir esta empresa (con una plantilla de unos 5.000 trabajadores) a una persona de 81 años. ¡Anda! Y yo que creía que la edad de jubilación era, obligatoriamente, los 65 años.

Y ¿Quién es Alberto Oliart? He tenido que hacer una esfuerzo de memoria y recurrir a las enciclopedias: Nacido en Merida el 29 de julio de 1928, Jurista y político (bueno eso no es merito especial, pues hay miles con estas actividades), participó profesionalmente en distintas entidades financieras, como el Banco Hispano Americano y el Banco Urquijo, (no se habrán confundido y en donde querían colocarle, ¿no sería en Caja Madrid o CCM? Tras las elecciones de 1977, Adolfo Suarez lo nombra Ministro de Industria y Energía, cargo en el que permanecerá sólo unos meses. En septiembre de 1980 se encargará del Ministerio de Sanidad. En 1981 fue nombrado Ministro de Defensa por Leopoldo C. Sotelo en su primer gobierno, después del golpe de estado del 23 F. Continuó en el cargo hasta la formación del primer gobierno de socialista. Desde aquella época apenas ha habido noticias sobre el, supongo que se habria retirado, jubilado.

Otro dato, aunque no tenga nada que ver con su actividad intelectual, política y profesional, es que en los años 90, su hija Isabel tuvo una relación sentimental con el cantante Joaquín Sabina, con el cual tuvo dos hijas, Carmela Juliana y Rocío. Por lo demás, nada. Ninguna relación con medio de comunicación alguno y menos con los audiovisuales, de los que ha dicho que no tiene ni idea de televisión, porque entre otras cosas, ni la ve. Supongo que de nuevas tecnologías, menos. Esto va a dar mucho que comentar, precisamente cuando ya se había dejado de hablar (para mal) de la Radio y Televisión Publicas. Lo malo de esto es que la moral de los trabajadores esta por los suelos, el espíritu de trabajo, de innovación o de fé en su cuerpo directivo, en sus gestores, como el Consejo de Administración, ha quedado totalmente devaluado, pues nadie cree en la persona situada al frente de la Corporación, como el octogenario Alberto Oliart.

¿Hacemos una porra? ¿Cuanto tiempo tardara en cambiar a la empresa privada La 2 de TVE, el Canal 24 horas y resto de canales ahora distribuidos por la TV Digital? ¿Cuánto en que se cierre o cambie de dueño, Radio 5 T.N., Radio 3, Radio Clásica y Radio Exterior de RNE.? y ¿La Orquesta y Coro de RTVE, podra seguir?

Por que, sin publicidad, ¿Correrá con todos los gastos de estas actividad audiovisual, los Presupuestos Generales de Estado? Y con los, creo que son, 5.000 trabajadores de RTVE, también los PGE? ¿Cuánto tiempo tardaran en cerrarse los Centros Territoriales de RTVE, como el de Cantabria, con poco mas de 30 minutos de programación, solo de lunes a viernes y poco mas de tiempo de antena RNE en Cantabria, para informar sobre esta región? Y eso ¿A quien le importa? Si lo que interesa en esta Radio Pública de Cantabria es, dar premios a futbolistas y organizar Galas de Folclore Cantabro ¡En Madrid! Espero que algunas cosas, como estas, cambien.